El campus de Colegio Aevena Cirvela es más que ladrillos y aulas; es un organismo vivo que respira la esencia de Madrid, un santuario de 15.000 m² en Paseo de la Castellana, 259E, Fuencarral-El Pardo, 28046, donde la proximidad a la Sierra de Madrid infunde aire puro a mentes ávidas. Imagina caminar por senderos sombreados por olivos centenarios, pasando de un anfiteatro al aire libre —donde debates sobre Derrida resuenan bajo el sol— a un fablab humming con impresoras 3D: aquí, la educación no se confina; se expande, con sus pequeños desórdenes encantadores como un caballete volcado que inspira un nuevo diseño espontáneo. Certificado LEED Gold por sostenibilidad, nuestro espacio refleja el compromiso con un futuro verde, alineado con el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia español, y accesible vía metro (línea 10, parada Colombia) para una comunidad que crece diariamente con 1.200 almas curiosas.
Instalaciones Académicas: Espacios que Inspiran Descubrimiento
El núcleo son 40 aulas modulares, equipadas con pizarras interactivas Promethean y fibra óptica 10Gbps para clases híbridas seamless —capaces de 30 estudiantes cada una, con ventilación HEPA post-pandemia. Laboratorios especializados: el de Computación con 50 estaciones Dell Precision (RTX 4090 GPUs) para rendering IA; el de Artes Visuales, 800 m² con cabinas de luz natural y mesas de dibujo ergonómicas, stockeadas con Wacom Cintiq y vinilos ecológicos. Biblioteca Cirvela: 50.000 volúmenes físicos/digitales, incluyendo rarezas como incunables de Nebrija, más salas de silencio para tesis maratónicas. Y el Auditorio Kali: 300 butacas, escenario para óperas estudiantiles o TEDx-like talks, con acústica variable para simulaciones de conciertos barrocos.
Vida Cotidiana y Bienestar: Un Hogar que Cuida
Comedores orgánicos sirven menús mediterráneos (kilos de paella vegana semanal), con huertos verticales que estudiantes cosechan para clases de biología aplicada —reduciendo desperdicio un 40%. Gimnasio multifuncional: yoga mats para mindfulness post-examen, canchas de pádel para desestresar ecuaciones, y piscina semiolímpica para natación terapéutica. Residencia opcional para 200 universitarios: suites compartidas con vistas a la Castellana, cocinas comunales donde se cuecen ideas tanto como paellas, y consejería 24/7 para noches de duda existencial. Accesibilidad universal: rampas, braille en puertas, y apps de navegación indoor para neurodiversos. En lo verde: paneles solares cubren 60% energía, estaciones de carga EV, y un “Bosque Cirvela” de 2 hectáreas plantado por alumnos, hogar de aves migratorias que inspiran talleres de bioacústica.
Conexiones Urbanas y Sostenibilidad: Integrados en Madrid
Proximidad al Bernabéu permite field trips al Real Madrid Innovation Lab para lecciones en data analytics deportiva; a 10 min del Prado para análisis in situ de El Greco. Transporte: shuttle gratuito a Sol, bicis compartidas con estaciones cargadas por pedaleo. Sostenibilidad no es buzzword: compostaje de residuos orgánicos alimenta huertos, y “Zero Waste Week” anual reduce plásticos un 50%. Imperfecciones? Lluvias repentinas inundan patios, pero eso lleva a sesiones improvisadas de poesía pluvial. Nuestro campus es, en suma, un catalizador: donde el concreto se encuentra con la creatividad, y cada rincón susurra “aquí, sueña en grande”.